Atenas características de su gobierno

Los ciudadanos eran responsables de controlar los gastos del gobierno. La participación ciudadana era clave en asuntos de gran relevancia.

La democracia ateniense se basaba en la rotación de cargos públicos. La educación cívica era fundamental para el funcionamiento de la democracia. Las alianzas y guerras se votaban directamente por los ciudadanos. El sistema ateniense no era perfecto, con críticas sobre la influencia de demagogos.

Los ciudadanos eran instruidos en retórica y filosofía. Reflejaban la importancia de la oratoria en la vida política ateniense. La ciudadanía ateniense era un privilegio reservado a hombres libres nacidos en Atenas. Buscaban asegurar que todos tuvieran las mismas oportunidades.

Esta Asamblea, llamada Ekklesia, decidía sobre leyes, política exterior y justicia. Su legado democrático influyó profundamente en la civilización occidental. Su popularidad podía influir en las decisiones políticas. La retórica y el debate eran fundamentales para persuadir a los miembros.

Era un sistema innovador, pero excluyente para esclavos, mujeres y extranjeros. Los estrategos tenían un poder considerable en asuntos militares y diplomáticos. El principio de isonomía, o igualdad ante la ley, era fundamental. El Areópago, un antiguo consejo de nobles, perdió poder gradualmente.

Este proceso reflejaba la importancia del consenso en las decisiones. Las leyes atenienses, aunque votadas por la Asamblea, podían ser desafiadas. Los tribunales populares, o Heliea, eran grandes jurados compuestos por ciudadanos. Buscaban garantizar la eficiencia del proceso democrático ateniense.